Las inmobiliarias ante la falta de terrenos disponibles para seguir desarrollando sus proyectos, ahora están ofreciendo altas sumas de dinero para comprar colegios con terrenos envidiables. Un nuevo problema que frenará el crecimiento de instituciones educativas.

A la dificultad de conseguir terrenos para construir nuevos colegios que respondan a la creciente demanda por más vacantes, tal como se señaló en el artículo de la semana pasada; se le añade un nuevo y complicado escenario: las inmobiliarias, luego de haber ocupado la mayoría de terrenos disponibles, ahora están comprando casas o locales subutilizados –como los de clubes, canchas deportivas, clínicas– y tientan a una serie de colegios que cuentan con grandes terrenos, según un informe de la revista Semana Económica (SE) 1327, del 17 de junio pasado. Muchos de estos colegios están ubicados en zonas de densidad media o alta, lo que les permitiría construir –atractivamente– desde 7 pisos a más.

Otro hecho que también afectará a algunos colegios son los proyectos de construcción de nuevas carreteras, corredores viales, viaductos, que deben expropiar sus terrenos, como en el caso de la ampliación de la vía expresa desde Barranco hacia la Panamericana Sur, que afectará a los colegios Champagnat y Hiran Bingham en el distrito de Surco.

El terreno más deseado ha sido y sigue siendo el del Colegio Alfonso Ugarte de San Isidro, que cuenta con 58,800 m2 valorizados en US$235 millones –a US$4 mil el metro cuadrado– debido a su estratégica ubicación en el centro financiero de la ciudad. Hay que destacar que el 85% de estudiantes de este colegio no vive en las cercanías, sino, por el contrario, vienen desde distritos alejados. El anterior gobierno habría pensado en privatizarlo y con el dinero recaudado invertir en la construcción de más colegios bien equipados en las zonas de procedencia de sus alumnos; pero ante el temor de que ese dinero no sea bien invertido o no cumpliera con lo ofrecido se retrocedió en el intento.

Otro colegio que las constructoras añoran es el San Agustín de San Isidro cuyo terreno de 55,500 m2 estaría valorizado en US$195 millones, a US$3,500 el metro cuadrado. En reiteradas oportunidades, representantes de inmobiliarias habrían tomado contacto para hacer el ofrecimiento de compra; sin embargo, los planes de la congregación religiosa no estarían en esa línea sino enfocados más bien en construir una universidad.

El colegio Sagrados Corazones Belén de San Isidro, también cuenta con una ubicación que interesaría al Grupo Interbank; sus 38,300 m2 estarían valorizados en US$76 millones a razón de US$2 mil el metro cuadrado; pero este colegio, en opinión de entendidos, por su excelente ubicación en una zona de población densa de alto poder adquisitivo y carente de colegios cerca debería reposicionarse mejorando su calidad para atender a un sector más exigente del nivel socioeconómico A.

También se puede mencionar en el distrito de San Isidro a colegios como el Santa Úrsula, con un terreno valorizado en US$88 millones gracias a sus 24,700 m2. Por su parte, el Isabel Flores de Oliva CIFO estaría valorizado en US$24 millones (12 mil m2), y e San José de Cluny en unos US$10 millones. En Miraflores, el Humboltd estaría valorizado en US$64 millones por sus 26 mil m2.

Estos extraordinarios precios resultarían sumamente tentadores para algunos promotores, pero la decisión no es fácil ya que las instituciones deben ponderar una serie de factores, tales como buscar nuevos terrenos, su viabilidad en su nueva ubicación, mantener sus alumnos, etc. En el caso de los centros católicos, incluso la decisión es más complicada ya que podría involucrar al propio Vaticano o a algunos terrenos que fueron donados para uso exclusivo de una institución educativa.

Proyecto de ampliación de la Vía Expresa
Según lo anunciado por la Municipalidad de Lima, la ampliación de esta vía tomará parte de los terrenos de los colegios Hiram Bingham y Champagnat, de modo tal que ambos colegios perderán áreas de recreación y canchas deportivas.

En el caso del Champagnat, colegio con infraestructura moderna que funciona en ese local desde el año 2005, la construcción de la vía dividirá el colegio en dos, con lo que los locales de primaria y secundaria quedaran separados. Esto preocupa a los padres de familia, sobre todo a aquellos que tienen hijos en ambos niveles, por la dificultad para llevarlos y recogerlos. El trazado de la nueva vía pasará por donde están actualmente las canchas deportivas y una parte del estacionamiento, sin afectar a los pabellones de primaria, secundaria, el coliseo ni el auditorio.

Similar situación ocurre con el colegio Hiram Bingham, que deberá ceder una zona recreativa, reduciendo el área del colegio por la parte oeste. Los padres ya sugieren comprar casas aledañas para recuperar el área recreativa, pues ya hay algunos propietarios que se encuentran incómodos por el anuncio de la obra que les quitará la tranquilidad actual.

La empresa constructora que propuso el proyecto invertiría US$57 millones para indemnizar por la expropiación de los 300 predios afectados, entre ellos ambos colegios.

En esta misma línea es probable que la Universidad Nacional Mayor de San Marcos sea expropiada para concluir el paso a desnivel entre las avenidas Universitaria y Venezuela.

Así las cosas, la solución a la creciente demanda de terrenos y también de colegios pasaría por un mix de opciones de acuerdo con la publicación de SE:

1. Mudar los colegios a otros distritos, que contarían con amplias áreas y modernas instalaciones, aunque habrá dificultad para movilizarse por lo caótico del las vías.

2. Colegios más pequeños en sus actuales ubicaciones con aulas en varios pisos, con canchas deportivas en otras zonas a las que se trasladarían los alumnos en días u horas especiales.

3. Otra propuesta más osada es dar un uso mixto a los terrenos, es decir, destinar en la zona baja a un centro comercial, y los pisos superiores dedicarlo al funcionamiento de colegios, tal como ya viene ocurriendo en otras ciudades.