El Perú avanzó 6 posiciones en el Índice Global de Competitividad 2012-2013, ubicándose en el puesto 61, luego de ocupar el puesto 67 en el año 2011-2012. Este ranking es elaborado anualmente por el World Economic Forum (WEF) de Suiza, que en esta oportunidad midió a 144 países.

Pero no todo lo que brilla es oro. Ocurre que el ascenso del Perú en este ranking se debió básicamente a la mejora de la variable “estabilidad macroeconómica”, que saltó del puesto 52 al 21, y que además en esta ocasión le dio mayor peso ponderado. Contrariamente, bajó en las variables: educación superior y capacitación, preparación tecnológica e innovación.

La variable “salud y educación primaria” se encuentra bastante rezagada, no obstante haber subido ligeramente del puesto 97 al 91. Esto obedece a la reducción de la mortalidad infantil y el incremento de la cobertura de la educación, es decir, más niños matriculados. Lo preocupante es que la baja calidad se mantiene invariable hace varios años tanto en esta medición como en otras similares harto conocidas.

La variable “educación superior y capacitación” retrocedió del puesto 77 al 80. Mayor aún fue el retroceso de la variable “preparación tecnológica”, que bajó del puesto 69 al 83. Estos resultados muestran que el país no cuenta con suficientes profesionales, y menos con técnicos calificados que empujen su desarrollo, con la grave consecuencia de que muchas empresas importarán cada vez más profesionales y técnicos, como ya ocurre en varios sectores empresariales.

La variable “innovación” es la más preocupante ya que bajamos del puesto 113 al 117. Esto es consecuencia de la poca o nula inversión del Estado en investigación y desarrollo, así como la escasa investigación por parte de las universidades.

Este ranking tiene gran importancia porque permite a los empresarios de todo el mundo evaluar las posibilidades de inversión en cada uno de los países de acuerdo con sus fortalezas. Podríamos inferir que sería bien difícil que a un empresario se le ocurra instalar una empresa de tecnología de servicios en el Perú sabiendo de sus grandes limitaciones. Si queremos que el país juegue en las grandes ligas o pase al primer mundo, el reto está planteado: mientras no mejore la educación en todos sus niveles, seguiremos siendo exportadores de materias primas.