Saint Patrick´s Christian College es una institución educativa cristiana y bilingüe, su sistema educativo comprende los niveles de inicial, primaria y secundaria; siendo sus valores centrales: fe, excelencia, integridad, respeto, responsabilidad y compromiso con el servicio.

¿Qué proyectos han desarrollado este año?

Este año hemos desarrollado proyectos ambiciosos; por ejemplo, en el área de ingles tenemos dos convenios: ser reconocidos como centro preparador para los exámenes de Cambridge (YLE: Starters, Movers, Flyers; Ket, Pet; FCE) y también Volunt-Teach, ser colegio que recibe a jóvenes inglesas para que asistan a nuestros profesores en el desarrollo de sus clases.

¿Cuáles son los principales valores educativos que promueve su institución?

Nuestra institución, como entidad educativa cristiana bilingüe, promueve en su esencia los valores cristianos como la bondad, el servicio, la solidaridad, la responsabilidad y la excelencia en todo lo que nuestros estudiantes emprendan, valores que los acompañarán a lo largo de sus vidas hacia el logro de sus metas. Formamos a nuestros estudiantes para su incorporación en la sociedad como ciudadanos responsables, pensadores, críticos, creativos y líderes.

¿Cuál es el perfil del alumno de este colegio?

A lo largo de todo proceso de aprendizaje, desde la etapa preescolar hasta finalizar secundaria, nuestra institución busca impregnar en cada estudiante, el perfil deseado, que contempla los siguientes aspectos: en todo su actuar, refleja ser cristocéntrico, comprende y se identifica como líder cristiano en su sociedad; practica la democracia a partir del reconocimiento de sus derechos y deberes; dirige su propio aprendizaje y anhela el conocimiento en su vida, creando procesos autónomos; usa información pertinente y confiable, y toma decisiones apropiadas y resuelve problemas con eficiencia.

Asimismo, se preocupa por los problemas nacionales y mundiales, analizándolos racional y objetivamente, asumiendo responsabilidades como ciudadano; está profundamente identificado con su familia, con su colegio, con la patria y sus manifestaciones culturales; valora la amistad, la fraternidad y el servicio social como símbolos de solidaridad, y practica la defensa del equilibrio ecológico y el uso racional de los recursos naturales para cuidar al planeta mejorando la calidad de vida.

¿Qué características y objetivos deben tener las tareas escolares para fortalecer el aprendizaje?

La escuela debe ser el espacio que brinde al niño un ambiente de disfrute y alegría, además del aprendizaje, en compañía de sus maestros y compañeros como miembros de la familia educativa.

Debemos entender que los tiempos de estudio asignados a los niños deben estar en función de sus habilidades, estilos y ritmo de aprendizaje; cada niño necesita tiempo que le aporte satisfacción en lo que aprende; habrá niños a los que les será suficiente el tiempo en la escuela, y otros para los que el tiempo de refuerzo en casa les brinde seguridad y motivación para seguir aprendiendo.

¿Qué papel debe de jugar la familia en la educación?

Los hijos necesitan la presencia de padres con solvencia emocional, que sean capaces de brindar seguridad mediante la cobertura de reglas claras (normas de convivencia, límites), protección; justo en esos momentos en los que se presentan los inconvenientes o tropiezos, padres que resuelvan los problemas, no que se desmoronen ante ellos esperando que sean los hijos quienes les brinden la solución.

Padres que en el día a día acompañen de manera sólida a sus hijos en sus inquietudes, frustraciones, en sus anhelos, en sus triunfos, en sus tristezas, en sus alegrías, porque todo esto forma parte de la construcción de su personalidad.

¿Queremos hijos fuertes emocionalmente? Seamos el modelo más cercano que ellos puedan imitar, necesitamos ayuda. Busquemos la adecuada y oportuna. ¿Queremos que nuestros hijos vivan satisfechos con su espiritualidad? Mostrémosle nuestra fe genuina, la que nos anima en momentos difíciles.

La provisión material no es la más ni la menos importante, es la necesaria para complementar los demás aspectos, por lo que esta debe ser la adecuada; en exceso, desvía la atención de lo relevante; la falta o carencia, debilita las perspectivas.

La felicidad de los hijos debe ser la consecuencia de la felicidad de los padres, esta debe ser el cerco que proteja de la desdicha a nuestros hijos, un cerco levantado con el amor como fortaleza que impida la entrada de todo lo que amenace el crecimiento emocional, intelectual, físico y social. La felicidad debe ser un estilo de vida, no un objetivo al final del camino.

Nuestra institución se interesa y trabaja muy cercanamente con los padres, porque entendemos que los hijos son el reflejo de las relaciones interpersonales dentro del hogar; nuestra escuela provee del espacio para acompañar la orientación y consejería a las familias mediante talleres especializados en temáticas familiares.